LAS RAÍCES DETERMINAN TU LIDERAZGO



Por Salvador Montoya/Escritor

Toda mente y espíritu que lidera se mantiene por los nutrientes que corren en las venas de su sistema de gobierno. El componente genético y cultural africano que tenemos los latinoamericanos nos hace parte de una herencia histórica transformadora. En primer lugar hablemos de la importancia de Egipto para la cultura africana y negra. Fue el gran historiador y físico senegalés Cheikh Anta Diop quien propuso y demostró que la antigua Egipto había sido una cultura negra. Y no sólo en la pigmentación de la piel sino en las raíces comunes culturales. Esto lo defendió en 1951. Su revolucionadora tesis fue rechazada. Pero Anta Diop no se detuvo y siguió persistiendo en buscar datos y pruebas. Nueve años después volvió a defender su tesis y obtuvo esa vez la aprobación. Sin embargo, en nuestra actualidad se miran estos hechos con suspicacia y exclusión. Porque las conclusiones que se derivan de saber que Egipto es producción negra destruye toda falacia del racismo político y epistémico eurocéntrico imperante en nuestra civilización. Como lo explica con erudición el filósofo Eugenio Nkogo.
Resaltemos tres implicaciones: La Biblia nombra al África desde el huerto del Edén porque uno de los ríos circunda la tierra de Cus (término antiguo para África). Entonces no es igual leer e interpretar Egipto teniendo como imagen a africanos. En otras palabras, fueron los africanos de los primeros imperios mundiales. Había literatura, matemática, filosofía, política, comercio. Es una cultura madre de la civilización planetaria. Recordemos que Egipto tuvo faraones negros. Dos: saber que Egipto (Kémit, nombre con el que se denomina desde la antigüedad y significa “país negro”; Egipto es un término de traducción griega) es cultura africana (la influencia árabe-musulmana vino después del siglo VII) y asiento de revoluciones científicas y humanísticas. Y por último, al reconocer que Egipto es cultura negra se obtiene la savia necesaria para seguir dando frutos de innovación y de pensamiento contrahegemónico (los griegos y los romanos tomaron muchas ideas y descubrimientos de los africanos egipcios). Los pueblos que triunfan son aquellos con identidades y proyectos culturales lúcidos y con raíces profundas en su historia. Conocer a Egipto es hacer liderazgo libre y de cambios positivos para la humanidad.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares